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Los agricultores volverán a la calle para protestar contra el acuerdo UE-Mercosur, que Planas defien

Mientras el comisario europeo de Agricultura dice que el tratado es bueno para la agricultura, Asaja y COAG han convocado a los productores para el día 16 por la falta de respuestas a los múltiples problemas del campo


Agricultores y ganaderos españoles volverán a manifestarse ante el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación el próximo lunes 16 de diciembre, convocados por Asaja y COAG. Lo harán para expresar su malestar por la «falta de respuestas eficaces a los muchos problemas» que acumula el sector, entre ellas, el acuerdo entre la UE y Mercosur, según informan en un comunicado conjunto. De hecho, esta mañana en Bruselas el presidente de Asaja, Pedro Barato, se unió al acto de protesta contra este acuerdo entre la UE y Mercosur organizado por FWA/UAW con el apoyo del Copa Cogeca y BoerenBond en la plaza Jean Rey.

Para los manifestantes resulta entendible que en un complejo contexto geopolítico como el actual  haya que fortalecer las relaciones comerciales, pero «no puede lograrse sacrificando a los productores agrícolas europeos» porque como avanzaron desde Asaja en un comunicado publicado en su web «sectores como la carne de vacuno, las aves de corral, el azúcar, el etanol y el arroz están en el punto de mira debido al desequilibrio que este acuerdo introduce, exponiéndolos a la saturación del mercado por productos de bajo coste provenientes de los países del Mercosur».


Pese a estas críticas, el ministro de Agricultura de España, Luis Planas, volvió a celebrar el cierre del acuerdo, al tiempo que lanzaba un mensaje tranquilizador a aquellos agricultores o ganaderos reticentes: «Somos una potencia agroalimentaria y no debemos temer a la apertura comercial», dijo en declaraciones a los medios celebradas en Bruselas, a donde acudió para participar en la reunión de los ministros de Agricultura y Pesca de la UE que se celebrará este lunes y martes. Fue en ese contexto donde Planas se enrocó en su defensa del tratado entre la UE y Mercosur: «Entiendo que puedan existir preocupaciones, pero si examinamos los contingentes que han sido adoptados en relación con los productos sensibles, son de una dimensión que no altera el mercado comunitario», defendió Planas frente a los detractores del acuerdo, entre los que se encuentran países como Francia o Polonia, según recoge Europa Press. 

Planas destacó que «si existe alguna duda y preocupación por parte del sector», también «existen las cláusulas de salvaguardia que además se pueden aplicar incluso a los propios contingentes como, ocurrió en el 2018 con la carne de vacuno ya procedente de Mercosur». 


«En relación con los acuerdos comerciales no hay que perder la perspectiva real y, sobre todo, de futuro. Somos una potencia agroalimentaria y no tenemos que temer a la apertura comercial», apostilló el ministro, que ve en el acuerdo  también un beneficio «estratégico» para España. Planas defendió que se trata de un acuerdo «equilibrado» y que las «ventajas» que se presentan para sectores como el vino, el aceite de oliva, el porcino o los cítricos, entre muchos otros, son «muy importantes para España».

«Hay mucho de mitología en torno a Mercosur», dijo el ministro, quien ha recordado que «lo importante es continuar avanzando y progresando», un camino en el que este acuerdo supone «un paso adelante». 

Al mismo tiempo el comisario europeo de Agricultura, Christophe Hansen, afirmó este lunes que el acuerdo de asociación entre la Unión Europea y Mercosur beneficia al sector agrícola y no se trata de un pacto en el que «todo sea blanco o negro».

«No es un acuerdo en el que todo sea o blanco o negro. Es un acuerdo en que el beneficio general es alto y nuestro sector agrícola también se beneficia», declaró Hansen en una rueda de prensa posterior a la primera jornada de la reunión de ministros de Agricultura de la UE recogida por Efe. En ese sentido, mencionó el sector lácteo y de los quesos con indicaciones geográficas de la UE, que según Hansen «se beneficiarán enormemente» del pacto con Mercosur.

«Pero tenemos que cuidar de los sectores sensibles (con respecto al acuerdo con Mercosur). Esto será crucial», comentó, e instó a escuchar y abordar las preocupaciones de esos sectores y de los agricultores.

Pero estas palabras parecen no acallar a los agricultores. Tras la oleada de protestas y manifestaciones que se produjeron desde finales del 2023 en las distintas provincias y comunidades autónomas, y que culminaron con una gran tractorada por el centro de Madrid en febrero, Agricultura puso en marcha un paquete de medidas que no contó con el refrendo de varias organizaciones agrarias y que consideran que se ha demostrado «claramente insuficiente» para dar respuesta a las demandas del sector, ya que las reivindicaciones de aquellas protestas «siguen aún vigentes». De esta forma, los altos costes de producción y los bajos precios en origen en buena parte de las producciones siguen siendo una rémora para las economías de las explotaciones agrarias, según Asaja y COAG.

Las organizaciones agrarias creen que hay reformas esenciales y cambios de funcionamiento en la Ley de la Cadena Agroalimentaria, o en el sistema de seguros agrarios que siguen sin producirse. Al igual que la adaptación de la reforma laboral y los costes salariales a las necesidades del campo, que lejos de llevarse a cabo, supone un lastre cada vez mayor para las explotaciones.

También lamentan la falta de inversiones e infraestructuras y una política hidráulica decidida, así como la mala gestión de los recursos hídricos en las distintas cuencas, que hace que convivan situaciones endémicas de déficit de agua con desastres como el provocado por la última dana que ha asolado el sureste peninsular.

Asaja y COAG han señalado que la «verdadera amenaza» que sufre el campo español es la proliferación de acuerdos de libre comercio de la UE con terceros países. Las importaciones de productos agrarios de Mercosur, Chile, Marruecos, Nueva Zelanda, con precios por debajo de nuestros costes de producción y sin cumplir las normativas que imperan para las producciones comunitarias, impactan gravemente en los agricultores españoles y europeos y provocan pérdidas inasumibles y cierres de explotaciones:  «Reclamamos un cambio de rumbo en las políticas que atañen al sector agrario, con decisiones mas proactivas en defensa de un sector que toca fondo, con ingresos que resultan insuficientes, con una pérdida de activos que resulta sangrante y con un relevo generacional que no es suficiente para mantener la actividad en nuestras explotaciones y en los núcleos rurales», han recalcado.


O Resumo Semanal - Edición Nº 626 - 12 de diciembre

Fuente: lavozdegalicia.es 10 de diciembre

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