El Tesoro colocó casi 5.000 millones en su última subasta
Los pequeños ahorradores le han vuelto la espalda —al menos, por el momento— a los depósitos bancarios y llevan todo el año poniendo sus ojos y su dinero en la deuda pública. La explicación está en su rentabilidad, ya que con unos tipos de interés que no dejan de crecer desde hace más de un año y la resistencia de la banca a remunerarles sus ahorros acorde a ellos, los clientes han visto en las Letras del Tesoro la mejor opción para invertir a corto plazo con seguridad y beneficios. La subasta de ayer volvió a confirmarlo, ya que el Tesoro colocó casi 5.000 millones de euros en Letras a seis y doce meses, pero la demanda (prácticamente 9.000 millones) casi dobló a la oferta.
Y es que la rentabilidad de los depósitos bancarios sube a cuentagotas, pese a los exhortos del Banco Central Europeo (BCE) y la presión del Ejectivo. Cabe recordar que este lunes, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos en funciones, Nadia Calviño, se reunió con los ejecutivos de las principales entidades financieras para insistirles en la necesidad de que mejoren lo que pagan a sus clientes por sus ahorros.
Según el BCE, de media, la remuneración a las familias está en el 2,2 % a doce meses, a distancia de la media de la zona euro y de otros países vecinos, que rebasan el 3,5 %. En resumen, no eclipsan la capacidad de atracción de las Letras. En la subasta de este martes, este tipo de deuda a seis meses se colocó al 3,6 %, una cifra histórica.
Lo mismo ha ocurrido con las Letras con vencimiento a un año, cuyo interés se situó en el 3,680 %, mínimamente inferior al 3,682 % de agosto y ligeramente por debajo del 3,8 % máximo alcanzado en subastas anteriores. El apetito de los pequeños ahorradores quedó patente a principios de año, cuando las sedes del Banco de España registraron colas insólitas de ciudadanos esperando para comprar deuda pública sin intermediación bancaria y, por tanto, evitando comisiones.
En la subasta de ayer, las peticiones no competitivas, es decir, las que corresponden a pequeños inversores y se cursan a través de la web, rebasaron los 540 millones de euros. En el caso de las Letras a doce meses, se adjudicaron 3.816 millones de euros para una demanda de 6.213 millones, mientras que en el producto a seis meses el importe colocado fue de 1.124 millones para peticiones de 2.774 millones.
Nueva subasta el jueves
En cualquier caso, quienes no hayan logrado comprar, tendrán una nueva oportunidad mañana, pues el Tesoro volverá a apelar al mercado este jueves ofreciendo cuatro denominaciones distintas de deuda, aunque a medio y largo plazo. En concreto, se emitirán Obligaciones a diez y a treinta años, además de otras obligaciones con una vida residual de tres años y dos meses; y otras indexadas a la inflación que vencen en el 2030 (vida residual de siete años y tres meses). Para hacerse con Letras a corto plazo habrá que esperar al día 12, cuando se subasten a tres y nueve meses.
O Resumo Semanal - Edición Nº 565 - 7 de Setiembre
Fuente: lavozdegalicia.es 5.9.2023
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